¿Por qué los hombres no tienen prisa por hacer una oferta?

¿Por qué los hombres no tienen prisa por hacer una oferta?
¿Por qué los hombres no tienen prisa por hacer una oferta?
Anonim

A pesar de que las mujeres han dominado con éxito todas las profesiones de los hombres durante bastante tiempo, todavía quieren ser débiles e indefensas en sus corazones. Cada niña sueña con un momento maravilloso en el que la llamarán para casarse, pero los niños no tienen prisa por hacer tal oferta.

Las razones más comunes para la indecisión de los hombres, que están escritas en revistas de mujeres y las mujeres creen sagradamente: la pérdida de libertad y responsabilidad por la decisión. En cuanto a la responsabilidad, no molesta a los hombres en absoluto, e incluso se regocijan por la libertad otorgada voluntariamente. Cualquier chico normal entiende y espera el hecho de que algún día tendrá que calmarse.

Las mujeres no pueden responder específicamente a la pregunta sobre el propósito del matrimonio. Los estereotipos sobre la "vieja sirvienta" y el hecho de que si no te llaman para casarte, entonces algo está mal con la chica, todavía viven en el mundo moderno. El miedo a quedarse sin un hombre y criar a un hijo usted mismo se puede llamar las principales razones por las cuales las mujeres se ven obligadas a hacer tales preguntas. Una boda parece un factor natural si una pareja ha estado viviendo junta por más de un año.

Puedes entender los temores de los hombres. Tienen miedo de ver a su mujer regordeta, no les interesa nada y siempre están parados cerca de la estufa. Dicen esto en broma, pero como saben, la verdad está presente en cada ridículo.

Ya no tienes que tratar de ser hermosa frente a un hombre, puedes ir sin maquillaje y pantalones de chándal, y prepararte para el trabajo como vacaciones. Según los hombres, esto se convierte en una regularidad después de la boda.

Las mujeres esperan que los hombres puedan cambiar después de la boda: dejen de jugar juegos de computadora, dejen de tirar cosas por la casa. Si hablamos de hombres, por el contrario, creen firmemente que las mujeres nunca cambiarán y seguirán siendo ninfas tan hermosas como antes de la boda.

Desde la infancia, la sociedad ha estado imponiendo esas características que el jefe de familia debería tener: trabajo estable, sin traición, la capacidad de criar hijos, no beber y estar en buena forma física. Tales estereotipos asustan a los hombres y pocos aceptan semejante matrimonio.

La vida familiar puede ser un verdadero infierno si no discute por adelantado con su pareja los planes conjuntos futuros. Pero si las expectativas de la pareja coinciden, entonces puedes hablar sobre la boda, solo debes decidir de antemano si las características del futuro esposo que ya tiene enfurecerán.